Estamos todos de acuerdo en que el césped hace bonito cualquier jardín. Es una hierba que bien cuidada da un aspecto genial allí donde esté. Un césped saludable protege al suelo de la erosión y ayuda, al igual que los árboles, a transformar el dióxido de carbono en oxígeno.
Por si lo anterior pareciera poco, el césped también ayuda a reducir el consumo de energía gracias a su capacidad de enfriamiento.
Diversos estudios han demostrado que, comparativamente hablando, las temperaturas del aire sobre la hierba llegan a ser de hasta 40 grados más frescas que las que se encuentran por encima de un área pavimentada.
Pero ¿cómo asegurar un buen crecimiento y mantenimiento del césped?
Estos serían los pasos a seguir:
1. Preparar el suelo
Utiliza un rastrillo o azadón para hacerlo. Cerciórate de deshacer todos los hacinamientos y cúmulos de tierra que encuentres, de manera que el terreno quede parejo. Posteriormente, compáctalo con un rodillo.
2. Aplicar el Polyter granulado (GR) al voleo según la dosis recomendada: 30 g (suelo arcilloso) a 50 g (suelo arenoso)/m2
3. Remover el suelo (con motocultor por ejemplo) para mezclar el Polyter en los 5-10 primeros centímetros de tierra (no más de 10 cm)
4. Nivelar el superficie de la tierra y aplicar el césped :
- Los rollos de pasto
- Las semillas al voleo
5. Riego
Deberás regar todos los días hasta que el césped haya brotado y crecido unas cuantas pulgadas. Para ello, te recomendamos regar tres veces al día, unos cuantos minutos cada vez.
6. Reducir el riego progresivamente del 30 o 40 % después de 2 meses hasta el 80% después de 5 meses
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